Se trata de Craig Mokhiber, un abogado estadounidense especialista en DD.HH. con más de tres décadas de trabajo en el organismo, desde donde cumplió distintos roles: Desempeñó cargos como jefe del Equipo de Derechos Humanos y Desarrollo y asesor principal de Derechos Humanos de la ONU tanto en Palestina como en Afganistán.
También «dirigió el equipo de especialistas en derechos humanos adscrito a la Misión de Alto Nivel en Darfur, dirigió la Unidad de Estado de Derecho y Democracia y se desempeñó como Jefe del Departamento Económico y Asuntos Sociales». Actualmente estaba a cargo de la Oficina de DD.HH. que la ONU tiene en New York.
La renuncia se da en un contexto en donde crece la solidaridad internacional con Palestina, y en las últimas semanas se registraron masivas movilizaciones al respecto en todo el mundo, incluidos los Estados Unidos.
El organismo declaró oficialmente que la renuncia se debía a «motivos personales», pero la carta de renuncia de Mokhiber no deja lugar a dudas sobre las razones: el ahora ex funcionario denuncia el «fracaso de la ONU en Gaza», acusa al organismo de «haber agachado la cabeza frente al poder» y de «Recibir enormes presiones por parte de Israel y sus aliados para no denunciar el genocidio contra los palestinos».
Además, en su escrito llama a «unirse al movimiento anti-apartheid que está creciendo a nivel mundial en apoyo al pueblo palestino». En diálogo con la agencia Europa Press, Mokhiber afirmó que «estamos viviendo un genocidio ante nuestros ojos y las organizaciones de la ONU no parecen tener poder para pararlo».
Días atrás de su renuncia, Mokhiber ya manifestaba sus posiciones en su cuenta de X, donde escribió: «El genocidio que estamos presenciando en Palestina es producto de décadas de impunidad israelí proporcionada por Estados Unidos y otros gobiernos occidentales y décadas de deshumanización del pueblo palestino por parte de los medios corporativos occidentales. Ambos deben terminar ahora. Defiende los Derechos Humanos».
The #genocide we are witnessing in #Palestine is the product of decades of Israeli #impunity provided by the US & other western governments & decades of #dehumanization of the Palestinian people by western corporate media. Both must end now. Speak up for #HumanRights
— Craig Mokhiber (@CraigMokhiber) October 30, 2023
En su carta de renuncia, además, denuncia cómo Israel presiona a los organismos internacionales de manera que toda crítica hacia ellos sea considerada «antisemitismo», igualándose con el pueblo judío, «algo que no pasa con las críticas a otros países teocráticos como Arabia Saudí o Birmania, que no son vistas como islamofobia o antibudismo, respectivamente».
Se trata de la ya segunda renuncia a un nivel relativamente importante por la brutal operación militar de Israel en Gaza. Hace dos semanas, un alto mando del Departamento de Estado de los EE.UU. llamado Josh Paul renunció a su cargo debido al «apoyo ciego» de la administración Biden a Israel.
Estas grietas en las altas esferas del poder no hacen más que reflejar un proceso mucho más profundo que viene desde abajo: la solidaridad internacional con palestina, cuando el genocidio en Gaza por parte de Israel muestra su cara más feroz y criminal.